Balance y liquidación de la primera vuelta
Las elecciones presidenciales suelen concluir con un ganador y varios derrotados. Las del 10 de abril, en cambio, han dejado como curiosa consecuencia una sensación de triunfo bastante extendida. Vale la pena revisar las razones de tan sorprendente desenlace y lo que este implica para el futuro.
Keiko Fujimori, la primera ganadora: sin duda, la candidata de Fuerza Popular es quien más motivos tiene para celebrar. Pasó de obtener 24% de los votos válidos en el 2011 a casi 40% esta vez, y de 37 congresistas entonces a una mayoría absoluta de 71 parlamentarios en esta elección. El triunfo de Fujimori fue de punta a punta. Su ventaja de casi 19 puntos sobre su futuro contendor le hace ver con optimismo su opción de triunfo en la segunda vuelta.
Pedro Pablo Kuczynski, el triunfador potencial: PPK, el tercer lugar del 2011, empezó segundo la campaña del 2016 y se mantuvo ahí la mayor parte del tiempo. Solo cedió la posición cuando surgió Julio Guzmán, pero al quedar este fuera de carrera, recuperó el puesto y logró mantenerlo hasta el final, a pesar de la arremetida de Verónika Mendoza. Sus menores anticuerpos en contraposición al extendido sentimiento antifujimorista le hacen pensar que puede derrotar a Keiko en lasegunda ronda.
Verónika Mendoza, derrota con sabor a triunfo: con reducida intención de voto hasta la salida de Guzmán, trepó luego rápidamente hasta llegar al “empate técnico” con PPK. Finalmente, no lo superó, al recibir PPK algunos votos “útiles” de candidatos rezagados y perder ella puntos valiosos a favor de Gregorio Santos, pero ganó en el sur y obtuvo la segunda bancada parlamentaria, después de Fuerza Popular. Con ello, se ha convertido en la nueva lideresa que la izquierda buscaba desde los tiempos de Alfonso Barrantes. Sus ojos ya están puestos en el 2021.
Alfredo Torres
Presidente Ejecutivo de Ipsos Perú
El Comercio, 17 de abril del 2016. p.A37