¿Nos vamos de Cybercompras?

La clasificación de Perú al Mundial marcó un hito en nuestra historia deportiva y también empezó a poner de relieve una realidad en nuestras prácticas de consumo: cada vez adquirimos más productos a través de Internet.

Autor(es)
  • José Cavero Director de Cuentas
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Después de 36 años de agónica espera todos nos contagiamos con la “fiebre del Mundial” y quisimos, a través de distintas acciones, acercarnos a ese sueño. ¿No te volviste loco queriendo comprar tus entradas para el partido Perú-Colombia a través de una página web? ¿Hiciste lo mismo para Perú-Nueva Zelanda? ¿Participaste en las preventas del famoso Álbum Panini? ¿Compraste camisetas? Y a la vez, ¿fuiste víctima del colapso de alguna de estas páginas web debido a la alta demanda de usuarios?

El comprador peruano empieza a cambiar sus hábitos de compra para buscar rapidez, simplicidad y practicidad; sin embargo, muchos aun subestiman las posibilidades del mundo digital por lo que no hay una infraestructura que soporte altos picos de demanda de productos o servicios que se adquieren a través de Internet. Años atrás, en Perú no había mucho optimismo en el desarrollo de las nuevas tecnologías ni en los nuevos espacios donde los usuarios y compradores interactuaban. En más de una ocasión escuché afirmaciones como que “somos un país primordialmente rural”, “todo se centraliza en Lima”, “los niveles socioeconómicos más bajos no tienen acceso a Internet”, “el peruano es una persona de perfil tradicional, rechaza lo novedoso y se resiste al cambio”. Incluso, hoy en día, algunos consideran que es prematuro pensar que Perú pueda tener un desarrollo óptimo para el comercio electrónico.

No se puede estar más equivocado: más de 13 millones de peruanos son considerados internautas, el 41% de la población total de Perú. La penetración de Internet en el país ha crecido con el paso de los años de forma exponencial, al punto de que incluso el 25% de los internautas (10% de la población total de Perú) ha incorporado el uso de Internet para realizar compras en línea, más de 3 millones de personas, y este dato seguirá aumentando.

poblacion investigada

Este dato nos hace pensar en los procesos de decisión de compra de los consumidores/compradores. Antes, la compra que conocemos como Shopper Pathway pasaba por un proceso distinto al que vemos hoy en día. Tras identificar una necesidad, el comprador se dirigía a una tienda y luego de un recorrido, una exploración y una selección, compraba el producto, satisfaciendo la necesidad inicial. Ahora podemos decir que este proceso se ve afectado por un elemento adicional, la búsqueda está dejando de hacerse en el punto de venta y muchas veces se hace un contacto previo a través de Internet.

Datos referenciales

El peruano ha cambiado su forma de hacer compras, cerrando -en muchos casos- transacciones a través del comercio electrónico (entradas para partidos de fútbol, conciertos, cine, el álbum Panini, transacciones bancarias, compras de alimentos en supermercados, servicios de delivery, taxis, etc.). En el peor de los casos, los peruanos usan los espacios digitales para informarse sobre un producto o servicio antes de tomar una decisión de compra en una tienda física. (inmuebles, autos, ropa, televisores, electrodomésticos, productos tecnológicos, etc.)

Hoy vemos a gigantes físicos del retail (Target, WallMART, Toys R Us) siendo víctimas del avance de gigantes del retail online como Amazon y Aliexpress. Esta es una realidad para la que Perú debe estar preparado: la tecnología avanza y fuerza cambios de formatos (pasó con los dispositivos para escuchar música, para ver videos, los de telecomunicaciones, las cámaras fotográficas) todo evoluciona hacia lo simple, lo más pequeño, lo que ocupe menos espacio y tome menos tiempo.

El consumidor peruano está demandando mayores facilidades a la hora de consultar y/o adquirir productos y servicios, y es al comercio electrónico a donde acude. Debemos mejorar nuestra infraestructura para soportar el alto tráfico de internautas que demandan determinados productos o servicios, la simplificación se traduce en seguridad para el usuario (al menos a nivel de percepción). Las compañías deben mirar estos ejemplos y encontrar un camino que optimice o acorte la distancia que hay entre el comprador y el producto: el espacio social es ahora un espacio virtual, en el que no solo debemos tener presencia de marca, sino donde también debemos “comerciar”.

En palabras de Leonardo Da Vinci: “no estamos viviendo una época de cambios, estamos viviendo un cambio de época”. Si estamos dispuestos a ser agentes de cambio, ¡seamos protagonistas de esto! Y no nos quedemos como espectadores de lo que sucede a nuestro alrededor.

Autor(es)
  • José Cavero Director de Cuentas

Consumidor & Cliente