La violencia en las democracias: el papel de las fake news, la desinformación y las redes sociales

Este análisis de Ipsos para Les Entretiens de New York revela que una pequeña minoría en los EE. UU. y Francia considera que la violencia es un medio viable para lograr objetivos políticos. El apoyo a la democracia sigue siendo fuerte en general, pero el escepticismo hacia los políticos, la continua difusión de noticias falsas y "burbujas de filtro", así como una cierta desconfianza en los hechos y la ciencia, ayudan a debilitar el apoyo a la forma en que funcionan nuestros sistemas democráticos en la actualidad.

Autor (es)
  • Didier Truchot Founder and Chairman of the Board of Directors
Get in touch

En este análisis de Ipsos para Les Entretiens de New York, mostramos cómo la violencia , aunque la mayoría de los ciudadanos estadounidenses y franceses se oponen, todavía es vista por una minoría no insignificante en ambos países como un curso de acción legítimo para lograr objetivos políticos. Una cuarta parte de los franceses considera que la violencia por motivos políticos es aceptable en algunas circunstancias, mientras que el 15% de los estadounidenses se niega a condenarla.

Actitudes hacia la democracia y sentimiento de "sistema roto"

El apoyo a la democracia como sistema político sigue siendo fuerte en ambos países, pero más de una cuarta parte de las personas dicen que están abiertas a experimentar con otros regímenes políticos o listas para dejar de lado algunos principios democráticos clave. Hay un deseo de una democracia más directa y fuertes críticas y sospechas hacia los políticos.

Una nota positiva es que, si bien el sentimiento de que “el sistema está roto” sigue siendo fuerte en muchos de los países más grandes del mundo, incluidos EE. UU. y Francia, este sentimiento ha retrocedido en todos los lugares donde se han realizado elecciones importantes recientemente. ¿Evidencia de que la democracia funciona?

¿Las noticias falsas y la desinformación, amplificadas por las redes sociales, juegan un papel en alimentar este clima neoviolento?

Nuestras encuestas muestran que, para grandes sectores de la población, las noticias falsas suelen ser difíciles de separar de los hechos. También hay un sorprendente grado de escepticismo frente a la ciencia: para el 50% de los franceses, el hecho de que un científico especializado en un área determinada demuestre un hecho no significa que ese hecho sea correcto. El 40% dice confiar más en su propia experiencia personal que en las explicaciones de los científicos para decidir si un hecho es científicamente correcto o no.

Esto impacta en la esfera política. Antes de las últimas elecciones intermedias, más del 60% de los estadounidenses estaban preocupados de que las decisiones electorales de las personas pudieran estar basadas en noticias falsas.

Las "burbujas de filtros" son una realidad. Tanto más cuanto que la mayoría de la gente considera que son "problema de los demás" y que a ellos mismos no les afectan. Dos tercios de la población de 27 grandes países piensan que "los demás" viven en una burbuja en internet, buscando sobre todo opiniones con las que ya están de acuerdo. Pero solo un tercio admite vivir en su propia burbuja online. El 60% piensa que “a otras personas ya no les importan los hechos, solo creen lo que quieren”.

Lea más en nuestro informe

notas

Fuentes utilizadas en este informe:

Crédito de la foto: lev radin / Shutterstock.com

Descargar
Autor (es)
  • Didier Truchot Founder and Chairman of the Board of Directors